Jugo de bergamota, un alimento precioso con mil propiedades beneficiosas. El bergamota es un cítrico de tamaño similar a la naranja. Pertenece a la familia de las Rutaceae, y se cultiva principalmente en la franja costera, en particular calabresa. El fruto tiene una corteza verde, y presenta una forma redonda ligeramente aplastada en los polos. Se utiliza para la extracción de aceite esencial, conocido desde siempre por sus propiedades beneficiosas: previene problemas de piel y enfermedades cardiovasculares en particular. Desde siempre se ha utilizado en el campo cosmético para la elaboración de jabones y perfumes, pero también en el ámbito alimentario, a través de la preparación de infusiones y del fabuloso jugo de bergamota.
La bergamota se utiliza en muchos campos, y en función del uso final se extraerá el aceite esencial o el jugo. El constituyente aceite esencial se extrae de la cáscara del cítrico, mediante presión en frío. Este aceite es útil en el ámbito médico ya que ayuda a combatir las infecciones intestinales, los cólicos, y gracias a la presencia de flavonoides como la esperetina y la naringina, también es un antioxidante natural. Se utiliza como calmante para la ansiedad, conciliador del sueño, y gracias a sus propiedades antibacterianas se usa como balsámico para las vías respiratorias. Las propiedades de la bergamota son verdaderamente infinitas: la Universidad de Tor Vergata ha constatado que el jugo del fruto es un remedio natural para combatir el colesterol. Además, tiene propiedades energizantes y tonificantes.
El jugo también posee dos principios naturales activos que actúan como estatina natural, ayudando a reducir los niveles de triglicéridos y de glucosa, además de los del colesterol malo en la sangre. Todo esto, sin provocar efectos secundarios! ¡No se termina aquí! Además de ser especialmente indicado para quienes sufren de trastornos cardiovasculares, el jugo de bergamota es un excelente apoyo para quienes padecen trastornos óseos ya que contiene vitamina C, B1, B2, A y E en abundancia.
El jugo de bergamota está compuesto por aproximadamente el 80% de agua, y es rico en vitaminas, como buena parte de los cítricos. Es fuente de flavonoides, antioxidantes naturales, pero no solo: el jugo también contiene ácido cítrico, azúcares, proteínas, fibra alimentaria, pectinas y fosfatos. El jugo de bergamota también aporta una buena dosis de minerales, incluyendo sodio, potasio, magnesio y calcio. Los valores nutricionales promedio por 100 g reportan energía de 41,22 kcal, grasas de 0,09 g, de las cuales ácidos grasos saturados son 0,02 g. Luego 10,77 g de carbohidratos, de los cuales 2,5 son azúcares. Proteínas por 0,010 g, fibra por 5,65 g y muy poca sal, 0,001 g. ¡Sin problemas para quienes sufren de hipertensión!
El aceite esencial de bergamota ha tenido siempre un gran uso en el campo cosmético. Desde siempre usado en perfumería para la producción de jabones y perfumes, no se debe olvidar que gracias a sus propiedades es útil también en la cosmética curativa: por su acción cicatrizante, se usa para la preparación de cremas especiales para la cara y el cuerpo. Por sus virtudes calefactoras, es útil para reactivar la circulación a través de la producción de lociones, y añadido a los champús es eficaz para combatir la caspa y la caída del cabello. No solo eso: al tener propiedades antimicóticas, es útil para tratar las micosis de las uñas o de los dedos.
El jugo de bergamota puede ser consumido diluido en agua al 30 o 50%, dado que al ser puro puede ser muy fuerte para consumir solo. El jugo en paquete intacto puede ser conservado durante un año, pero una vez abierto debe ser guardado en el refrigerador y consumido dentro de 5 o 6 días como máximo, para mantener la integridad del producto puro y fresco. Para aprovechar las propiedades beneficiosas, se aconseja tres vasos al día, uno para cada comida, o a media tarde para una pausa sabrosa y sobre todo refrescante, además de nutritiva.
La ayuda del jugo de bergamota en la cocina es valiosa tanto para recetas dulces como saladas. También se puede utilizar la cáscara del fruto, sustituyéndola en la pasta por limón rallado. Se puede usar para la creación de excelentes mermeladas, para postres y galletas. En la versión salada, el jugo de bergamota también se usa para dar sabor al aceite. Se puede macerar la cáscara en un cuarto de litro de aceite, durante un mes. El aceite así obtenido es excelente para aderezar ensaladas, pescado y pasta.
Entre las recetas, recomendamos la tarta perfumada de bergamota, simple y rápida de preparar, además de tener un efecto seguro. Se necesitan los ingredientes clásicos para las tartas caseras: harina, leche, mantequilla, azúcar, huevos, levadura y azúcar glas. Obviamente, el jugo de bergamota. Se mezclan los ingredientes hasta obtener una masa lisa y espumosa, y luego se hornean a 180 grados durante unos 40 minutos. Recuerden controlar la cocción insertando suavemente un palillo en la tarta. Una vez lista, espolvoréenla con azúcar glas. ¿El resultado? ¡Una tarta simple, suave, con una abrumadora fragancia mediterránea de bergamota! ¡Buen provecho!
Spaghetti & Mandolino recomienda el jugo puro de Bergamota Bio del Consorzio Motta: es 100% natural, sin adición de aditivos, azúcares, agua o conservantes. Solo los mejores bergamotas calabreses, para llevar a su mesa un jugo puro, con un irresistible aroma mediterráneo. Déjense envolver por el intenso aroma de la bergamota mediterránea: una alegría para los sentidos, y para su salud!
Antonella Iannò
Le recomendamos que disfrute
✔ ¡Ha añadido el producto a su carrito!