Azienda Agricola Buccio Mario

Muchísima pasión y un fuerte deseo de proteger su propia tradición es el lema que Buccio Mario conoce para producir su queso. Un trabajo constante para que nazca un buen Bagòss, leche vacuna de Bagolino y un toque de azafrán, pero no pueden faltar el amor y la dedicación para conservar este arte quesero. La atención prestada a la elección de la alimentación de los animales y los constantes controles sobre la leche permiten obtener un producto de alta calidad, a pesar de que el proceso de producción del queso ha permanecido prácticamente igual que hace cien años. La tecnología y la innovación ayudan al hombre, pero la pasión y los conocimientos transmitidos de generación en generación hacen que el Bagòss sea considerado un queso de alto nivel.

Agricultura Buccio Mario: la historia

Difícil datar precisamente la fundación de la empresa de la familia Buccio ya que, la pasión por la cría y por la producción de queso se pierde en el tiempo.
Los archivos de registro han permitido a la familia establecer que en 1847 nació Stefano Buccio y que Mario Buccio, en el año 1951, es el tercer descendiente respecto a su antepasado. Así como su tatarabuelo, él también continúa el oficio familiar. Mario, en un cierto momento, decide dejar caer esa cadena de legado iniciada por su padre y crea su propia empresa, convirtiéndose así en la sociedad actual, gestionada por dos generaciones de Buccio: junto a Mario y Nicoletta, su esposa, están los hijos Gianluca y Sara, respectivamente de 1983 y 1990, ayudados por Ionut que hace muchos años trabaja con ellos.
El producto principal de su producción siempre ha sido el queso Bagòss, con una sola diferencia: respecto al pasado, hoy es posible encontrar la marca que garantiza al consumidor la originalidad de sus productos. Junto a otras realidades del territorio, hace 15 años hicieron que el queso Bagòss fuera “presidio slow food Italia” y desde 2018 son los referentes.

Agricultura Buccio Mario: la producción de Bagòss

El proceso de producción del queso ha permanecido prácticamente inalterado con el tiempo. Desde generaciones reproducen las mismas metodologías de trabajo de la leche, garantizando un producto que mantiene intactas sus características históricas, culturales y gastronómicas. Con el tiempo, solo han cambiado las herramientas técnicas, como las ordeñadoras, introducidas por el desarrollo tecnológico.
Hasta hoy, además de las tradicionales formas de queso Bagòss, producen quesitos de cabra, quesos mixtos, ricotta, mantequilla, yogur y también algunos embutidos. Desde siempre, la familia Buccio ha estado atenta al cuidado y la salud de los animales, a los cuales no se les administra ningún tipo de alimento genéticamente tratado, sino solamente los llamados “OGM Free”. Para garantizar la mejor calidad de nuestros productos, las vacas permanecen 240 días al año en el establo, comiendo heno complementado con piensos, mientras que el resto del año las llevan a pastar, donde son libres de comer las hierbas frescas de los pastizales de sus montañas. El regreso al establo ocurre en los primeros días de octubre con la tradicional transhumancia.

Desde 2016, la empresa Buccio también gestiona un pequeño local en el corazón del centro histórico del pueblo de Bagolino, “La Malga del Re”, donde se pueden adquirir y degustar los productos de la empresa, además de visitar la bodega de maduración.