Olio Vigliotti

Olio Vigliotti es una empresa agrícola oleícola de gestión familiar que desde hace cuatro generaciones produce aceite en el Bajo Tavoliere, más específicamente en Cerignola, Puglia. Quien se encarga es la familia Vigliotti y todo comenzó con el abuelo Cristofaro, cuando heredó las tierras de su padre Matteo y amplió el primer olivar. Luego pasó a manos de Matteo, hijo de Cristofaro, quien, siguiendo las enseñanzas de su padre, inició con mucha ambición, dedicación y sacrificio una mayor expansión, haciendo crecer la empresa familiar.
Con los años, los resultados comenzaron a llegar, desarrollando también la venta de aceite a particulares y conocidos, quienes, satisfechos con la bondad y calidad del aceite, se convirtieron en los primeros verdaderos clientes.

En esta línea, Cristian, hijo de Matteo y nieto de Cristofaro, dirige hoy la empresa con la ayuda de su padre. Cristian continúa innovando la empresa y desde 2018 decide proponer y promover su aceite. Impulsado por la voluntad de emprender un plan empresarial de mayor alcance, decide arriesgarse y crear una nueva actividad acorde a los tiempos comenzando por la marca. Así es como nace Olio Vigliotti.

Olio Vigliotti: ¡un aceite sano, genuino y delicioso!

Olio Vigliotti nace de un trabajo de extrema cuidando de la materia prima: los olivos son tratados tal como se hacía antes y con la pasión que ponían nuestros antepasados. Las aceitunas se recogen a mano y se muelen después de pocas horas.
El aceite de oliva virgen extra monocultivar Coratina es un aceite envolvente y rústico con un retrogusto amargo y al mismo tiempo picante en la parte final de la degustación. La característica principal de la Coratina es su alto contenido de polifenoles, importantes antioxidantes naturales.

Un packaging de la tradición: Olio Vigliotti también en orzas de cerámica

El packaging es un elemento fundamental para promover un producto hoy, especialmente para captar la atención de los consumidores más exigentes. Y Cristian lo sabe bien: por eso las diversas presentaciones del aceite han sido elegidas con cuidado, prestando atención a cada detalle, con el fin de hacer todo más original y atractivo. Además de esto, también hay un regreso a la tradición: el recuerdo gastronómico, es decir, el orcio de cerámica. Es un paquete único, pintado a mano por ceramistas puglieses y nace de la idea de regalar algo diferente que no sea solo un objeto que sea en sí mismo. La línea de orzas de cerámica ha sido creada para quienes aman las soluciones más vivas sin renunciar a un diseño único e inimitable. Y sin renunciar a la tradición: sí, porque antaño el aceite se guardaba en orzas de cerámica, el recipiente por excelencia, perfecto para la conservación ya que evita el contacto con la luz y el aire, enemigos del aceite, evitando su oxidación, la dispersión de las características naturales y permitiéndole respirar mejor!