Corte Gonella

Joven soldado que regresó de la Gran Guerra, Giuseppe Gonella ya era agricultor originario de Astigiano, se encuentra pasando entre las bellas colinas de Valpolicella, donde conoce a la abuela Natalia, propietaria de algunos viñedos en S. Peretto. Forman juntos una familia y el abuelo Giuseppe inicia la actividad de vinificación en los años 30.

Gonella, una historia de familia

Inicialmente sus colaboradores son las familias de los arrendatarios, residentes en la casa de campo adyacente. En los años 50, la gestión de la empresa pasa al hijo Giovanni. Persona dotada de gran cordialidad, vive junto a la familia de su hermana María, transmitiendo su pasión de viticultor a los nietos Giorgio y Giuseppe.

Estos últimos, a través de la experiencia del tío Giovanni, aprenden desde jóvenes los secretos fundamentales para la producción de esos renombrados vinos que son el orgullo de Valpolicella.
A mediados de los años 70, con el cese del arrendamiento, Giorgio y Giuseppe, tras finalizar sus estudios, se incorporan a la realidad agrícola y vinícola de la empresa.
Los dos hermanos a lo largo de los años aportan mejoras tanto en el cultivo de los viñedos como en la producción y crianza de los vinos.
En 2006, tras el fallecimiento del tío Giovanni, Giorgio y Giuseppe fundan la marca "Corte Gonella" y así continúan con compromiso y pasión la actividad vitivinícola transmitida por el tío también a Paolo, hijo de Giorgio.
Juntos, Giorgio, Giuseppe y Paolo, continúan la tradición familiar con ese entusiasmo que con el tiempo nunca ha faltado.

Corte Gonella: vinos de la Valpolicella Clásica

La empresa con los viñedos adyacentes está situada en la parte histórica (identificada como zona Clásica) de Valpolicella, en el Municipio de Negrar, en la localidad San Peretto.

Los 6 hectáreas de viñedo se encuentran a aproximadamente 250 metros sobre el nivel del mar, así que en la zona pedocollinar. Los terrenos tienen composición volcánica basáltica (toar) y una parte sobre terreno calcáreo, con exposición a Sureste, ideal para la óptima maduración de las uvas.
Las formas de cultivo de las vides son exclusivamente en parra, con el suelo cubierto de hierba y con la limpieza de las malas hierbas en los espacios entre las filas, mediante la labor del terreno excluyendo cualquier tipo de herbicidio químico. La edad media de los viñedos es de 20 años y la producción por hectárea es de 120 quintales en los mejores años (máximo permitido por el reglamento de Vinos Valpolicella).

Las uvas cultivadas son principalmente las variedades de corvina, corvinone, rondinella, molinara y otras variedades autóctonas. La corvina, junto con el corvinone, es la variedad más importante entre los ensamblajes del Valpolicella, gracias a sus características tecnológicas en la fase de vinificación y propiedades fenólicas, dando así estructura y cuerpo al vino.

La vendimia generalmente ocurre entre finales de septiembre y octubre, llevada a cabo completamente a mano, seleccionando primero los mejores racimos destinados a la producción de Amarone y Recioto, que se colocan en platos y luego se llevan al fruttaio para el pasificado. En un segundo momento se recoge la uva que queda en la viña, se prensa fresca, destinada al Valpolicella.
La empresa, inscrita en el Consorzio Tutela Vini Valpolicella, vinifica en su bodega sus propias uvas, llevando los vinos obtenidos a la crianza en cubas de acero y para algunos de ellos en tonneaux y barricas de roble.
Aquí se maduran durante 12-18 meses antes de ser embotellados, donde el vino descansará aún por un breve período antes de ser puesto a la venta.